Abrazarte siempre con ternura y tener la paciencia que el amor exige. Hablar cuando hagan falta palabras y compartir el silencio cuando no. Consentir y sentir respecto al pastel de terciopelo rojo. Vivir al abrigo de tu corazón y llamarlo siempre hogar.
miércoles, 27 de julio de 2011
# Yo te prometo un para siempre, ¿tú me lo prometes?
+ Eso es demasiado tiempo, todo se puede torcer y podemos acabar odiándonos.
# Bueno, aunque te odie, si me necesitas iré.
+ No lo creo...si me odias no me querrás ver...
# Pues cierro los ojos.
+ No me querrás oír.
# Pues no te dejare hablar...
+ ¿Entonces?
# Te abrazaré y te diré... ¿Te acuerdas de aquella tarde que te prometí un para siempre? Lo decía enserio.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario